Investigadores del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), organismo dependiente del Cabildo, viajan hoy lunes [día 26] a Filipinas en una nueva misión científica que pretende contribuir a mejorar la vigilancia volcánica de este país del sudeste Asiático situado en el Anillo de Fuego del Pacífico y dónde se localizan algunos de los volcanes más activos del mundo. Los trabajos que el ITER desarrollará en Filipinas por un periodo de cuatro semanas se realizarán en colaboración con el Instituto Filipino de Volcanologia y Sismología (PHIVOLCS), organismo dependiente del Ministerio de Ciencia y Tecnología (DOST) del Gobierno de Filipinas y responsable de la vigilancia símica y volcánica en este país. Estas actividades se enmarcan en un proyecto de cooperación internacional de 18 meses de duración co-financiadas por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación del Gobierno de España, con el apoyo del Servicio Administrativo de Cooperación Internacional y Asuntos Europeos correspondeinte al Área de Economía y Competitividad del Cabildo Insular de Tenerife.
El principal objetivo de este proyecto es proporcionar las capacidades y los recursos técnicos necesarios para fortalecer la vigilancia volcánica en Filipinas mediante la incorporación de los trabajos de emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) como una herramienta científica-técnica de gran utilidad. Durante esta misión científica se realizarán trabajos de emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) fundamentalmente en los volcanes de Pinatubo, Taal y Mayón. Los trabajos que se desarrollarán en los dos primeros se centrarán en sus respectivos cráteres y más concretamente en sus lagunas crátericas. En el caso del Mayón los trabajos de emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) se realizarán en la mayor parte del edificio volcánico.
La erupción mas reciente del Pinatubo se produjo en junio de 1991, despues de 500 años sin ningún tipo de actividad y fue una de las erupciones más grandes y violentas del siglo XX. Los efectos de la erupción se sintieron en todo el mundo. Envió grandes cantidades de gases hacia la estratósfera, más que cualquier otra erupción desde la de Krakatoa en 1883. El volcán Taal se encuentra a unos 50 kilómetros de Manila y ha entrado en erupción violentamente varias veces causando pérdida de vidas humanas en las áreas pobladas adyacentes. Debido a su proximidad a áreas pobladas y a su historia eruptiva, el Taal fue designado como uno de los volcanes de la década con la finalidad de promover estudios destinados la prevención de futuros desastres naturales relacionados con el fenómeno volcánico.
Otro de los objetivos de esta misión científica en Filipinas será evaluar la emisión de los principales componentes de los gases volcánicos (vapor de agua, dióxido de carbono, dióxido de azufre, y sulfuro de hidrógeno) emitidos a la atmósfera por el volcán Mayon. Este edificio volcanico de unos 2.421 metros de altura, se encuentra al norte de la ciudad de Legazpi y a 330 km al sureste de la capital, Manila. Es el volcán más activo de Filipinas, habiendo entrado en erupción alrededor de 50 veces en los últimos 400 años. La emision de gases por el volcán Mayón se evaluará mediante el uso combinado de sensores ópticos remotos tipo miniDOAS con otros sensores portátiles que permiten una caracterzación química del penacho volcánico del Mayón.