El consejero y presidente del Organismo Autónomo de Museos y Centros (OAMC) del Cabildo de Tenerife, Francisco García-Talavera, presentó el pasado viernes [día 24] el libro titulado “Azúcar. Los ingenios en la colonización canaria”, una obra que compila las distintas intervenciones del ciclo de conferencias que, sobre este mismo tema, se celebró el pasado año.
Esta publicación, financiada por el proyecto Museumac (red que integra a los museos de Madeira, Azores y Canarias), fue coordinada por Ana Viña Brito, Mariano Gambín García y Carmen Dolores Chinea Brito y reúne las intervenciones de un grupo de especialistas en la investigación histórica del azúcar canario en el siglo XVI para hacer una puesta al día de los conocimientos científicos en la actualidad.
Francisco García-Talavera destacó la relevancia de una obra como esta, en la que se recoge cómo el azúcar fue el motor económico que impulsó el desarrollo de la sociedad isleña en los primeros años de la colonización europea del Archipiélago. El presidente del OAMC recordó que este producto era muy apreciado en su época y “su comercialización facilitó la inserción cultural y comercial de Canarias en el ámbito europeo mediterráneo y atlántico”.
A principios del siglo XVI las fábricas de azúcar o “ingenios” eran una de las industrias más complejas y avanzadas tecnológicamente de su tiempo. La complejidad venía dada por los diferentes y necesarios pasos que exigía el azúcar para su elaboración. Cada etapa del proceso productivo exigía un especialista propio, una maquinaria o utensilios singulares e incluso unos espacios y construcciones individualizados donde realizarlo.
Para plantar cañas, levantar un ingenio y ponerlo en funcionamiento era necesaria una inversión de dinero muy importante, y para comercializarlo fue necesario conectarse a redes internacionales de mercaderes que lograron hacer llegar este producto -desde un origen tan lejano como podían ser las Islas en aquel tiempo- a los mercados europeos.